"Buen Lejos, Buen Cerca"

En el arte existe una expresión que dice: "buen lejos, mal cerca " haciendo referencia a aquellos cuadros o composiciones artísticas al óleo o pintura que al apreciarse de lejos pueden verse hermosas, fascinantes y perfectas; pero al acercarte te das cuentas de aquellos detalles e imperfecciones en el óleo o pintura que son pequeños, pero a la vez significantes cuando observas de cerca la elegante composición. Restando de esta manera valor al momento de su compra.  

El liderazgo y el Ministerio es un arte que exige una demanda

El liderazgo y el Ministerio es un arte que exige una demanda. Jesús dijo al que más se le da, más se le demandará (Lucas 12: 48). Al nivel de entrega del llamado requerirá del mismo, mayor demanda y exigencia. Hoy en día vemos ministros y ministerios que puede apreciarse desde lejos, como una pantalla de perfección y dignos de admiración, incluso logran inspirar a muchos; es decir, tienen un buen lejos, pero cuando te acercas a ver sus vidas, se ven tantas imperfecciones, dando a conocer que no viven en lo que predican y justificando sus malas acciones a los más cercanos, a aquellos que pueden ver con más detalle esa dualidad en la que viven; es decir, tienen un mal cerca y de esta manera restan valor al ministerio y al llamado que se les asigno.

Creo que nuestra demanda en este tiempo es vivir conforme a nuestro diseño de santidad y justicia. Esa exigencia es para nuestra generación, que requiere de hombres y mujeres que no sólo tenga un ministerio o llamado admirado de lejos, sino que sus vidas de intimidad sean ejemplos dignos de seguir para aquellos que logran verlos de cerca. Como decía el Apóstol Pablo, "se imitadores de mi como yo de Cristo" (Filipenses 3: 17). Creo que para esta expresión se necesitó una vida en legalidad y justicia que hasta las tinieblas sabían quién era Pablo cuando los exorcistas judíos quisieron reprender un espíritu en el nombre de Jesús que predicaba Pablo, la respuesta del espíritu malo fue, a Pablo conozco (Hch 19: 15) porque era un hombre de carácter sin dobleces conocido en la esfera espiritual por vivir en integridad.

 Estamos viviendo en un tiempo de mayor demanda y exigencia en el cumplimiento de nuestro llamado y asignación en el Cuerpo de Cristo

Estamos viviendo en un tiempo de mayor demanda y exigencia en el cumplimiento de nuestro llamado y asignación en el Cuerpo de Cristo, que la gente pueda ver a Cristo cuando se acerque a ver la Gloria que refleja nuestra vida, sea la misma que ven de lejos y aún más intensa al ver de cerca nuestros actos, actitudes y palabras.

En medio de tantas decepciones ministeriales y de muchos cansados por causa de la religión, hemos llegado al tiempo de vivir sin dobleces, reflejando el amor y el carácter de Cristo, para que el que te vea de cerca pueda ver un reflejo del mismo Cristo en tu vida y como dice el Apóstol Pablo, que seamos transformados de Gloria en Gloria conforme a su semejanza (2 Cor 3: 18)